Llega septiembre y con él la vuelta al cole de los niños, con la vuelta a las rutinas y a los horarios, con lo que tendremos que volver a organizar transportes, comidas, actividades extraescolares etc.

¿Y por qué no aprovechar esta vuelta a la vida escolar que hacer que los niños coman de manera más saludable, incluyendo alimentos que nos aporten más beneficios y menos comida precocinada? A continuación te dejamos unos consejos para conseguirlo, incluyendo las increíbles ventajas de los frutos secos en la alimentación.

En el desayuno, debemos procurar ingerir alimentos que nos aporten hidratos de carbono complejos o de absorción lenta, que ayudarán a los niños a tomar suficiente energía para afrontar un día lleno de exigencias física, cognitivas y emocionales, como seguir el ritmo de las alimentos clases, hacer ejercicio físico, relacionarse y jugar con sus compañeros… También son importantes las vitaminas y grasas saludables presentes entre otros alimentos, en los frutos secos, como las nueces, las avellanas o las almendras. Un ejemplo de desayuno completo sería un bol con fruta, copos de avena, frutos secos y semillas.

En el tentempié de media mañana sería aconsejable dejar la bollería industrial y apostar por alimentos que repongan la energía que hemos gastado durante la mañana, que suele coincidir con las asignaturas más exigentes del día. Volvemos a recomendar aquí un puñado de frutos secos para volver a cargar las pilas. Podemos hacer nuestros propios cócteles de frutos secos variados o ir alternando cada día entre nueces, almendras, avellanas, pistachos, anacardos, manises…  para aprovechar que cada uno de ellos nos aporta muchos beneficios diferentes y un chute de energía saludable.

Otra de las comidas importantes es la cena, el momento en que nos preparamos para descansar para afrontar un nuevo día. No debe ser muy copiosa, pero sí ingerir en esta comida alimentos que nos ayuden a conciliar un sueño profundo y reparador. Una de las cualidades presentes en muchos de los frutos secos, como las almendras, nueces o avellanas, es su contenido en triptófano, un aminoácido que nos ayuda a dormir y a sentirnos de buen ánimo.