Desde el 10 de marzo y hasta el 9 de Abril de 2024, toda la comunidad musulmana celebra el Ramadán, un período de ayuno diurno, pero también lleno de espiritualidad y de encuentros familiares. Por tratarse de una fecha basada en el calendario lunar, el día de comienzo varía cada año.

Para los musulmanes, el mes e Ramadán es un período de verdadera reflexión de su relación con Dios, Alá, donde la mentira o el cotilleo no tienen cabida y donde se dedican a rezar y a recitar el Corán.

El ayuno obligatorio se establece durante este mes, desde la salida hasta la puesta del sol y las comidas previas al ayuno y para romper el ayuno se convierten en reuniones familiares y con otros miembros de la comunidad.

Uno de los grandes protagonistas del ramadán son los dátiles, ya que se sigue la costumbre de romper el ayuno como lo hizo el profeta Mahoma, comiendo dátiles y un vaso de agua, se trata de un alimento omnipresente en todo oriente medio, muy rico en nutrientes, de una fácil digestión y que proporcionará al cuerpo los azúcares necesarios para sobrellevar el ayuno.

Hay varias maneras de tomas los dátiles: solos, rellenos de otros frutos secos y incluso rebozados en coco. O como lo hacen en El Líbano, elaborando una bebida llamada Jallab, a base dátiles, agua de rosas y melaza de uva que se toma acompañada de piñones.

La celebración del Eid al-Fitr pone punto y final a un mes de ayuno, oración y de unión con Alá, cuyo significado es «Festival de romper el ayuno». Este último día de ramadán comienza con la oración a primeras horas de la mañana y prosigue con reuniones y comidas con miembros de la familia y de la comunidad, felicitándose con la expresión «Eid Mubarak», se se traduce como «Feliz Eid».